Fundar la Asociación de Políglotas del Perú no es una simple coincidencia. Los idiomas han sido parte de mi día a día durante todos estos años.  Así como también viajar, conocer personas de todas las regiones de mi país y del mundo. Aprender nuevas costumbres, tradiciones, religiones, ideologías, idiomas. 

​

Simultáneamente, siempre he tratado de dar una mano a quien la necesita, no solo en Perú.  He tratado de practicar con todo el corazón el “Tikún Olam”  del hebreo: תיקון עולם lo cual significa "reparar el mundo".

 Desde pequeño mis padres nos inculcaron que todo ser humano debería dejar una pequeña contribución al mundo; haciendo servicio social, mostrando interés por la humanidad y comportándose con bondad, empatía y solidaridad. Convirtiéndonos así, en un ejemplo a seguir para muchos, y lograr cambiar la mentalidad de crueldad, egoísmo e indiferencia que muestran las sociedades.

De pequeño tuve la gran suerte de vivir con mis abuelos y sin duda, lo más destacable de mis abuelos fueron los valores que marcaron su vida: educación, respeto, humildad, sencillez y generosidad. 

​

En estos tiempos donde todos estamos muy ocupados y cada vez miramos menos al de al lado, y ocupamos nuestro tiempo, entre otras cosas, en usar la tecnología desde que nos levantamos hasta que nos acostamos, surgió este proyecto que pretende que en nuestra vida haya un motivo más grande que nosotros mismos. Ayudar a un niño o niña a labrar un mejor futuro para él o ella y su familia.

​

Nuestra misión es trabajar para reducir paulatinamente la barrera con la que se topan nuestros niños debido a la falta de recursos económicos, hasta derribarla por completo, integrando entidades educativas dedicadas a la enseñanza de idiomas, empresas y seres humanos generosos, para poder proveer becas de estudio de idiomas a estudiantes sobresalientes, pero de escasos recursos.  

​

El conocer 9 idiomas me dió la oportunidad de vivir, trabajar y estudiar en diferentes ciudades de América, Europa, Africa y Asia; de ser capaz de realizar mis sueños y ayudar a los que me rodean y eso es precisamente lo que quisiera para cada niño o niña del Perú ( y el mundo).

​

Somos una asociación de personas que aman aprender nuevos idiomas y que tendremos como reto común aprender un nuevo idioma cada 2 años.

Me enorgullece poder compartir con ustedes mi gran sueño y les pido de corazón me ayuden a ayudar. 

​

​

​

                                                                                                                                        Jack Bytton